No es más bonito porque nieve.

Caen los copos de nieve,
poco a poco,
caen sobre el suelo, para morir ahogados.
Para deshacerse sin más, en un mundo de hermanos.

No hay humanidad en ellos,
lanzados desde el vacío,
caen para convertirse todos en uno,
para perecer como voz que canta a coro.

Todo sigue su camino,
ese destello desde el cielo tiene que caer al igual que nosotros quedarnos solos.
No es más bonito porque sea blanco.
No es más bonito porque esté nevado.